Microcemento para exteriores y zonas humedas.

Waterproof Art es un microcemento impermeable, especialmente indicado para zonas húmedas (lavabos, platos de ducha, frentes de cocina…) y de exterior (terrazas, porches, escaleras, piscinas…).

El Microcemento en exteriores es una excelente opción para obtener un pavimento continuo, sin irregularidades y de buena resistencia que se integre con el entorno. Es ideal para revestir terrazas, jardines, porches o patios con acabados de calidad.

Su aplicación en paredes y suelos exteriores permite cubrir grandes superficies en una sola pieza. La funcionalidad conduce a superficies modernas y fáciles de limpiar, ya que el resultado sin juntas evita que se acumule la suciedad.

Es el material perfecto para transformar por completo el exterior de una casa. Permite innovar en la decoración y crear espacios personalizados que se ajusten a cualquier estilo decorativo.

¿Por qué aplicar microcemento en exteriores?

  • El microcemento en exteriores ofrece una alta resistencia. Es ideal para conseguir pavimentos y superficies antideslizantes.
  • Es un revestimiento decorativo resistente a la luz solar, al cloro y a los cambios de temperatura.
  • Ofrece la gran dureza para superficies transitables y no transitables.
  • Además de su fino espesor, el microcemento es apto para su aplicación en superficies exteriores. La dureza lo hace muy resistente a golpes, fisuras y a la intemperie.
  • Además de su fino espesor, el microcemento es apto para su aplicación en superficies exteriores. La dureza lo hace muy resistente a golpes, fisuras y a la intemperie.
  • Además de su fino espesor, el microcemento es apto para su aplicación en superficies exteriores. La dureza lo hace muy resistente a golpes, fisuras y a la intemperie.
  • Es una garantía de seguridad en cualquier proyecto de reforma exterior.
  • Se puede utilizar para revestir paredes, estanterías o escaleras y se puede combinar con otros materiales para exterior.
  • El microcemento ofrece las superficies antideslizantes según los acabados aplicados. La textura del revestimiento es la clave para evitar caídas y resbalones. Cuanto más rugosa sea la superficie, menor será el deslizamiento.
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