Limpieza y mantenimiento del microcemento

A la hora de realizar tareas de limpieza y mantenimiento en las superficies de microcemento, lo primero que hay que tener en cuenta es que este tarda entre 2 y 4 semanas en fraguar totalmente, por lo que la primera semana hay que abstenerse por completo de limpiarlo, ya que podría afectar a sus propiedades.

De hecho, los 2 primeros días después de la aplicación del microcemento se debería pisar o tocar lo menos posible la superficie, e incluso es aconsejable, durante la primera semana, protegerlo para evitar que le pueda caer cualquier tipo de líquido.

A partir de estas primeras semanas de asentamiento del material en las que este adquiere todas sus propiedades, el mantenimiento será parecido al de suelos de madera natural, es decir, basta con la utilización de agua y jabón neutro para limpiar y mantener la superficie limpia e intacta.

Además, no se deben utilizar productos abrasivos en la superficie, como lejía, disolventes o ácidos, ni materiales duros como cepillos metálicos.

También es recomendable la utilización de una mopa industrial para realizar la limpieza y de un felpudo en la entrada para evitar la entrada de arenilla, que es el principal enemigo de este tipo de superficies, y así evitar rayaduras, o incluso utilizar protecciones en las patas de las sillas y mesas o demás mobiliario que pueda ser arrastrado por la superficie.

Por último y para maximizar la protección, se puede aplicar cera o barniz similar al que se utiliza en los suelos de madera para minimizar los efectos de las rayaduras o de cualquier derrame de líquido sobre la superficie.